Carlos Sobera frena a un participante imprudente.
En el reciente episodio de ‘First Dates Hotel’, se vivió un momento de tensión inesperada cuando Carlos Sobera, habitual maestro de ceremonias con una sonrisa permanente, se vio obligado a dejar de lado su afabilidad característica para adoptar un tono más serio. Este cambio de actitud se debió a un incidente protagonizado por Fran, un joven gerente de gimnasio de 30 años, que, confiado en su apariencia física, intentó impresionar a Arianna Aragón, una de las camareras del programa.
Sin embargo, lo que Fran no sospechaba es que la simpática joven que atendía la barra era, nada más y nada menos, que la hija del propio Sobera. Confiando en su atractivo y en lo que él consideraba sus innegables habilidades de seducción, Fran no perdió tiempo en presumir ante el equipo del programa de sus supuestos encantos.
Tras un infructuoso intento de conquistar a dos chicas en la piscina, redirigió toda su atención hacia Arianna, dedicándole comentarios que pretendían ser seductores mientras ella, con su amabilidad profesional, le servía una bebida. Con una sonrisa confiada, le dijo: “Mejor no te digo lo que quiero… pero sí, una piña colada”, convencido de que su aspecto físico sería suficiente para ganarse el interés de la camarera.
Una lección inesperada en ‘First Dates Hotel’.
Sin embargo, la situación se tornó incómoda cuando Fran, al interpretar erróneamente la amabilidad de Arianna como un indicio de interés, comenzó a sugerir que ella debería convertirse en su cita en el programa. Este malentendido no pasó desapercibido para Carlos Sobera, quien, en un giro inesperado, decidió intervenir para proteger a su hija.
Con un tono firme y decidido, se acercó al joven y, dejando en claro que Arianna no estaba disponible para ser su cita, lo instó a respetar su rol como parte del equipo. Fue un momento de tensión en el que quedó patente que Sobera no permitiría que se cruzaran ciertos límites, sobre todo cuando se trataba de su familia.
“Vengo a rescatarte, que estás pasando demasiado tiempo aquí y tienes que atender a más clientes”, fueron las palabras de Sobera cuando se dirigió a su hija, interrumpiendo así la incómoda conversación que Fran había iniciado. Luego, volviendo su atención hacia el joven soltero, le dijo sin rodeos: “No es tu cita y es mejor que lo sepas desde ya”, un comentario que puso fin de inmediato a las expectativas que Fran albergaba. El aspirante a conquistador no tuvo más remedio que aceptar la situación, aunque no sin antes quejarse ante el equipo del programa: “Porque ponéis camareras tan guapas”, una reacción que evidenciaba su frustración ante el inesperado desenlace.
El respeto prevalece en el set del programa.
La intervención de Carlos Sobera no solo fue un acto de protección hacia su hija, sino también una firme declaración sobre la importancia del respeto, incluso en un ambiente distendido como el de ‘First Dates Hotel’. A pesar de que Fran se mostró sorprendido por la intervención, la firmeza de Sobera dejó claro que las reglas y los límites dentro del programa son inquebrantables.
Fue un recordatorio de que, más allá del contexto relajado y de las risas que caracterizan al show, existen principios que deben ser respetados, tanto por los participantes como por todos aquellos que forman parte de la producción. Así, el mensaje quedó claro: en ‘First Dates Hotel’, las normas están bien definidas, y la cordialidad no debe confundirse con un permiso para cruzar ciertos límites.
