El cliente que pidió perdón por pedir tarde y luego criticó la comida
En las redes sociales, es frecuente encontrar reseñas de clientes que valoran su experiencia en un establecimiento, así como las respuestas de los dueños del local. A veces, estos intercambios de comentarios son tan surrealistas que se vuelven virales. Otras veces, las reseñas se convierten en verdaderas historias que merecen ser narradas con detalle.
Un ejemplo de este tipo de historias es el de un cliente que se disculpó por pedir comida a domicilio a una hora muy tardía, diciendo que estaba enfermo. El establecimiento le trató con amabilidad y le regaló un pan de ajo para que se recuperara. Sin embargo, la reseña final del cliente fue de lo más sorprendente y nada sutil.
La nota emotiva del establecimiento y el giro inesperado de la reseña
La historia la compartió el perfil de Instagram @soycamareroo (409 mil seguidores), que publica contenido relacionado con el mundo de la hostelería y suele mostrar reseñas curiosas. Según cuenta Jesús Soriano, el responsable de la cuenta, todo empezó con un pedido de una hamburguesa a domicilio que llevaba una nota del cliente: “Lo siento por pedir tan tarde, estoy muy malo y me acabo de levantar y no he comido. Lo entiendo si canceláis el pedido porque es muy tarde y tenéis que cerrar, gracias”.
“Hasta ahí vale, se ve una persona empática y que lo pide con educación, disculpándose con antelación”, dice Soriano. El establecimiento decidió corresponder a la amabilidad del cliente y le envió un pan de ajo gratis con su pedido, junto con otra nota: “Gracias por tu mensaje. No te preocupes por pedir tarde, no nos importa. Aquí tienes un pan de ajo gratis para que te encuentres algo mejor. ¡Recupérate!”, con caritas sonrientes y un corazón.
Pero lo que parecía una bonita historia terminó con un giro inesperado, la reseña que el cliente dejó para valorar el servicio. Le dio cuatro estrellas al establecimiento y escribió: “Me pusieron un pan de ajo porque me encontraba malo y me dejaron una emotiva nota junto al pedido, daría a cada trabajador un besito en la frente”. Hasta aquí todo bien.
Pero luego añadió: “Pero por otra parte, el queso de la hamburguesa estaba súper duro y parecía un plástico quemado. Agradezco el pan de ajo, pero al menos podrían aprender a cocinar. Sinceramente ojalá me hubiesen dicho que estaban cerrados, no voy a volver a pedir nunca más.”
La reseña causó sorpresa e indignación entre los usuarios de Instagram, que calificaron al cliente de “desagradecido” y bromearon con su actitud.
