La verdad sobre ‘First Dates’ según una participante
‘First Dates’ es un programa que lleva años conquistando a la audiencia con sus historias de amor. Cada noche, vemos cómo solteros de todo tipo se conocen en el restaurante de Carlos Sobera y tratan de encontrar a su media naranja. Pero, ¿cómo es el programa por dentro? ¿Qué pasa detrás de las cámaras? Una de las solteras que pasó por el programa ha decidido contar su experiencia en las redes sociales y ha dejado a muchos con la boca abierta.
La productora paga, el programa se graba por la mañana y el final es mentira
La soltera en cuestión es Mery Aranda, una ‘tiktoker’ que compartió su cita en ‘First Dates’ hace unos meses. En un vídeo, Mery ha revelado algunos detalles que quizás muchos no sabían sobre el programa. Por ejemplo, que la productora les paga por ir al programa, que la grabación se hace por la mañana y que tardan varios meses en emitir el episodio.
Además, Mery ha confesado que ella no fue al programa buscando el amor, sino para salir en la tele y hacerse viral. También ha afirmado que no hay nada guionizado, pero que les sugieren algunos temas de conversación. Y ha alabado al equipo del programa por conseguir que no vean a sus citas antes de entrar al restaurante.
El momento de pagar la cena es un “paripé”
Pero lo más sorprendente ha sido su revelación sobre el momento de pagar la cena. Según Mery, es un “paripé”, ya que al salir del programa les devuelven el dinero que han gastado. Así que, al parecer, el gesto de invitar o no a la cita no tiene ninguna consecuencia real.
El vídeo de Mery ha causado un gran revuelo en las redes sociales, donde muchos fans de ‘First Dates’ han reaccionado a sus palabras. Algunos se han mostrado decepcionados por descubrir que el programa no es tan auténtico como pensaban. Otros, en cambio, han defendido al programa y han criticado a Mery por ir con segundas intenciones. Y otros, simplemente, han tomado sus declaraciones con humor y han bromeado sobre el dinero de la cena. Lo que está claro es que ‘First Dates’ sigue dando que hablar, tanto dentro como fuera de la pantalla.
¿Qué os parece?