¿Qué provocó el incendio de Campanar?
El pasado 22 de febrero, un voraz incendio arrasó un edificio de 20 plantas en el barrio Campanar de Valencia, dejando un saldo de diez víctimas mortales y numerosos daños materiales. Aunque las autoridades han apuntado a algunas posibles causas de la rápida propagación del fuego, como la fachada de poliuretano, el efecto chimenea y los fuertes vientos, todavía se desconoce el origen de las llamas.
Entre las hipótesis que se barajan, la más probable es la de un fallo eléctrico en el piso 86, donde se inició el fuego. Según declaró la administradora del edificio, Adriana Banu, el inmueble no tenía gas y todo funcionaba con electricidad. El inquilino de la vivienda, que se encontraba de viaje, negó haber dejado ningún aparato conectado, pero reconoció que había tenido problemas con el calentador y los enchufes.
Otra posibilidad es que el incendio se originara en un toldo motorizado, que podría haber sufrido un cortocircuito por un mal contacto eléctrico. Así lo sugirió el arquitecto Jon Goitia, tras analizar las imágenes del siniestro.
Un edificio con antecedentes
No es la primera vez que el edificio de Campanar sufre un incendio. En 2012, la vivienda de la puerta 51 se incendió por completo, aunque se logró evitar que las llamas se extendieran al resto de la finca. En aquella ocasión, la causa se atribuyó a un cargador de teléfono que estaba enchufado.
Este precedente, junto con los testimonios de los vecinos, ha servido de punto de partida para la policía científica, que ha iniciado una investigación más profunda para esclarecer el origen del fuego. Sin embargo, todavía no se ha podido realizar una inspección exhaustiva del edificio, debido a las altas temperaturas que persisten en las últimas plantas.
La búsqueda de las víctimas
Desde que se accedió al edificio el viernes por la mañana, la prioridad ha sido la localización de los cuerpos de las víctimas mortales. Cinco de ellas fueron confirmadas por los drones de bomberos, que las avistaron durante los vuelos nocturnos. El sábado se encontró a la última persona desaparecida, elevando el número de fallecidos a diez.
Además de las víctimas mortales, el incendio ha dejado decenas de heridos y afectados, que han perdido sus hogares y sus pertenencias. La solidaridad ciudadana se ha manifestado con numerosas donaciones y ofertas de alojamiento para los damnificados.